Ofrece una gran variedad de platos clásicos peruanos como el ceviche de ají amarillo, buns de pescado y calamar, curry nikkei, empanada de lomo saltado, jalea de mariscos, papas a la huancaína, anticuchos de corazón, conchitas a la parmesana, ají gallina y el Bife Apanao.
Entre los postres se destacan el clásico suspiro limeño y la chocoteja.
La propuesta estética del restaurante tomó como puntapié los procesos artesanales y la exploración de materialidades que podrían aportar calidez y simpleza al espacio existente.
El resultado final es un espacio rústico y relajado sin dejar de ser elegante, logrado a través de diferentes texturas y revestimientos.
El color predominante es el verde, haciendo referencia a la vegetación amazónica y el morado, que alude al nombre del lugar.
El color predominante es el verde, haciendo referencia a la vegetación amazónica y el morado, que alude al nombre del lugar.
También se pueden encontrar intervenciones con soga que remiten a la pesca y el mar, acompañados por revestimientos típicos peruanos que conviven con la estética pre existente.
El toque final se encuentra en las lámparas con forma de ostras y un pez gigante colgado en medio del espacio hecho íntegramente en mimbre, un trabajo artesanal que atraviesa la impronta de Tigre Morado.
La filosofía Tigre Morado nace de la energía de su gastronomía, coctelería y ambientación, donde cada uno es invitado a formar parte de un increíble conjunto de experiencias que trasladan al país del pacífico.
La filosofía Tigre Morado nace de la energía de su gastronomía, coctelería y ambientación, donde cada uno es invitado a formar parte de un increíble conjunto de experiencias que trasladan al país del pacífico.
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